Colaboración con eldiario.es.
“¡Faltan médicos!” Es la cantinela repetida con insistencia últimamente en los medios de comunicación por múltiples líderes políticos, de distinta ideología, que van desde la ministra de Sanidad hasta la presidenta de la Comunidad de Madrid. Sin embargo, tal afirmación, en cuanto se ponen los datos sobre la mesa y se analiza qué está ocurriendo en realidad con la población facultativa en España, se desmorona como un castillo de naipes. Si dichos dirigentes sufrieran estos días un arrebato excepcional de honestidad, la frase sería otra: “¡Faltan médicos… que acepten nuestras miserables condiciones de trabajo!
Aunque el problema de la “falta de médicos” se está dando en muchas comunidades autónomas, el caso más destacado, por indignante en cuanto a sus características, es el de la Comunidad de Madrid. Hace unos días, en el programa de Ana Rosa Quintana, Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad, afirmó lo siguiente: “Médico que esté en paro, médico que esta misma tarde yo contrato en la Comunidad de Madrid. El problema es que yo no puedo estar quitándole médicos al País Vasco y Cataluña”. Por otro lado, Ayuso ha declarado, en múltiples ocasiones, que faltan médicos en toda España, y también tuvo la ocurrencia de decir que habría que bajar las notas de corte de la carrera de Medicina (algún asesor, por piedad, tendría que haberle explicado cómo funcionan las notas de corte en nuestro país…).
La realidad es que en España hay más médicos que en la mayoría de los países del mundo. La tasa de médicos es de 566 por 100.000 habitantes, por encima de la media de la OCDE. Además, España es, en estos momentos, un productor masivo de médicos. Las facultades de Medicina han proliferado como setas en los últimos 15 años y hemos pasado de tener 28 a 55 lugares donde se imparte la carrera. España en 2019 era el segundo país del mundo con más facultades de Medicina por millón de habitantes, solo por detrás de Corea del Sur. Y esto era cuando en España “solo” había 42 facultades; probablemente ahora tengamos el récord mundial.
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