Colaboración con Mètode.
El constante goteo de casos de viruela del mono en diferentes rincones del mundo mantiene expectantes a las autoridades sanitarias. En ese sentido, la Organización Mundial de la Salud (OMS) comunicó en una rueda de prensa el pasado 14 de junio que «el brote mundial de la viruela del mono es claramente inusual y preocupante». El director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha convocado al Comité de Emergencias para el próximo 23 de junio con el fin de analizar si el brote de viruela de mono representa una emergencia de salud pública de interés internacional y asegura que no quieren esperar «hasta que la situación esté fuera de control».
Por ahora, se han confirmado más de 1.600 casos y se han detectado casi 1.500 casos sospechosos en 39 países. En siete de los Estados el virus ya era endémico, mientras que en los 32 países restantes el agente patógeno se había identificado por primera vez. Se han registrado un total de 72 muertes por esta causa desde el comienzo del año 2022, todas ellas en países donde el virus circula desde hace años. En España, se han confirmado 313 casos, la mayoría de ellos en la Comunidad de Madrid (194). 308 de los casos son hombres y, según los datos disponibles, la transmisión se ha producido por contacto íntimo y prologando durante las relaciones sexuales.
La OMS sugiere que la transmisión de la viruela del mono podría haber pasado desapercibida durante varias semanas o incluso más tiempo hasta que saltó la alarma sanitaria. La aparición repentina e inesperada de múltiples casos en diferentes regiones del mundo, sin relación con viajes a zonas donde la viruela del mono es endémica, apunta a este fenómeno.
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